Día tras día
el mismo espejo me mira,
me juzga,
me analiza...
envejecemos juntos
sin remedio, sin alternativa...
Y en medio de este pensamiento
sin saber por qué,
una tristeza sin igual
me inunda, me ahoga...
se apodera de mí totalmente,
me habla, me susurra...
Y en lugar de batirme
revolverme y huir,
sucumbo a la pena
me abrazo a ella
y me duermo sobre su regazo.
PATRICIA PALLE 20-01-2023