Un propósito me impulsa hacia adelante,
Queriendo ser mejor, todo momento,
Y es luchar por triunfar, siendo correcto,
Llenándome de Dios, paz abundante.
Buscaba la verdad, cual caminante,
Que por el mundo va, loco y desierto,
Esperando encontrar, camino recto;
Pero desesperado y jadeante.
Ya en el recodo del camino andado,
Quise mirar atrás, de todo lo hecho,
Y comprendí que nada había logrado.
Me decidí, me recosté en su pecho
A Jesús acepté, me sentí amado,
Y ya no miro atrás, sigo derecho.