Raúl Bonilla

La Iglesia y el Silencio

El aroma del incienso 

Que penetra entre los resquicios de los vitrales 

Las imágenes de los santos

Las invocaciones de los ángeles 

 

La banca ha escuchado muchas plegarias 

Promesas que han encendido muchas velas 

Esperando encontrar alguna guía

Aunque parezca que navegamos a la deriva 

 

Yo no creo en la casualidad 

De alguna forma siempre regreso a esta iglesia

Una y otra vez, sea en el sueño o en la vigilia

Nunca pregunté si había otra posibilidad

 

Ya no pido estar en paz 

De hecho ya no se que pedir 

Solo pretendo rezar 

Esperando que Dios sí lo pueda descifrar 

 

Pero de algún modo soy feliz 

Aunque no pueda describir lo que siento 

La imagen de la iglesia se desvanece 

Y despierto en el lugar donde vivo en silencio