Despedida
Eres tu el origen de la luz
que un día lleno de brillo
a este viejo cielo azul
qué cantó como un grillo,
solitario por las noches
en el balcón tragando frío,
al verte subir al autobús
supe que lo que harías
era perderte en el campus
y saber lo que aprenderías
era para volverte un cactus,
pero seguirás siendo la niña
de los ojos cafés y tristes
y sonrisa tenue y delicada
jamás olvidaré que te fuiste
dando mi vida por terminada,
te amo a pesar de estar triste
aún yo recuerdo tu mirada
la más amorosa que me diste,
hoy tengo mi vida resignada
a que te hayas olvidado de mí,
por qué fuiste muy obstinada
para aquel día poderme decir
que me querías y no volverías.