Este secreto mío te quiere tanto,
que se me ha vuelto así de grande,
así de redondo,
así de dulce naranja.
Quiero que sientas
este perfume de azahar
que sale de mi ombligo.
Quiero que te veas atrapado
para espiar en mi adentro,
en nuestro nuevo nido.
¡ Mira qué hermosa estrella
cuida este campo fértil!
Tu marca, enérgica y segura,
ha clavado tu apellido
en mis simientes.
Y me ha brotado una gota de sangre...
¡estamos vivos!
Que felices somos
en esta ronda escondida
inventada de sueños,
de imposibles ausentes.
De pájaros azules,
de insectos,
de pétalos flotantes en mi vientre!
(¡ Creo que la pequeña luna,
enmudeció para siempre!)