Socrates MacDonna

Marido y Mujer

I

El amor y el respeto:

dos caras de la misma moneda,

Para ella, respetarle es un reto

y él puede que amarla no pueda

II

A él Dios le dice que ame a su esposa

y a ella le dice: respeta a tu esposo

pues ella tiende a ser irrespetuosa

y él no es un hombre muy amoroso

III

El respeto entre hombres es crucial

para que una relación sea duradera

es visible en el saludo del arte marcial

y en la reverencia a una bandera.

IV

Consiste en saber valorar los intereses

de aquel a quien se le muestra respeto

Parece reciprocidad y muchas veces

Se asemeja a hacer música en dueto.

V

Pero el respeto solo se obtiene

cuando se es un hombre respetuoso

Pues la falta de respeto detiene

 Aquello que al hombre le es provechoso

VI

Si de auto respeto tú mismo careces

El de ella tú no has de exigir

Ya que tú sabes que no lo mereces,

Es egoísta el respeto pedir

VII

Entre las mujeres es esencial

amar y sentir un profundo amor.

Aunque respeto no es algo trivial

Para ellas amar tiene mucho más valor.

VIII

Ellas tienen una tendencia natural 

a procurar bien de un recién nacido,

incluso a costa del interés personal

Y si eso no es amor, es muy parecido

IX

El amor se manifiesta en la empatía;

en la simpatía y en el sacrificio:

Amor no es solo una palabra vacía,

Es hacer bien sin obtener beneficio

X

Pero el amor no es un sentimiento

sino una decisión tomada a voluntad

Por  ello amar es un mandamiento

Y no un efecto de la espontaneidad

XI

El respeto en el hombre y el amor en la mujer

Son dos caras de una misma moneda

La mujer amada resiste pues es su deber

Y el hombre respetado siempre se queda.

XII

Así pues, mujeres, respeten a sus maridos

Y ustedes, hombres, amen a sus mujeres

El amor y el respeto le mantendrá unidos

Y les instarán a cumplir con sus deberes.