Entre tus huellas, negra noche,
lastimeras sombras se pierden,
siempre eludiendo a fiera muerte,
entre de nostalgia, derroche;
siete trompetas al desorden,
siete copas que se convierten
en negras trampas donde mueren
seres con terribles temores;
sordos y ciegos se tropiezan
entre ayes y gritos sonoros,
que en el pantano se fermentan;
un vano vivir entre hinojos,
pues llegó la hora en que se siega:
abismo infernal sin retorno...