Azae

A un caballero

Mis labios se acomodan a los tuyos,
Somos el beso en el mar
y remamos primero como cuerdos
luego naufragamos sin rumbo.

Primero se fusionan los latidos,
Las miradas se cruzan.
Los sesos son el elefante jugando en los sentidos.
Aquí impera la ley de la  tribu!

Hagamos de la piel lo que hacen las palmas,
Juntemos las manos y el alma
Hallamos oasis en nuestros desiertos.
Oh!  el elíxir desnudo de la piel nos calma.

Mis secretos se abren como alas
esperando el reposo de tu vuelo
que domestica firmemente a esta dama.

Azae
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