Somos buenos amigos y no
podemos enredarnos en las patas
de los caballos, para hacer de buenos
amantes. Yo estoy en mi posición
no cometemos ese error; tal vez
yo cometí ese pecado que
hoy no sabes que hacer, que todo
se descubrió, hasta tu amado
está sopechando que hay ahí entré
los dos. Solo quiero que siga
con su querer, que yo sigo como
antes de ser su gran amigo, como
estábamos en el ayer y nuestra
historia se acabó.