La lluvia cae majestuosa y serena
sobre el pasto humedo y preponderante;
el viento revolotea tenaz el rocío,
y mi alma se atiborra do contemplo...
No se advierte la luna, ni su acompañante:
nubes grises y preponderantes ocultan azúl nocturno
do contemplo, atiborrando el silencio con empeño
provocando alegría y desconcierto.
La noche es intesa, y es apenas, madrugada;
contemplo de la lluvia, su fría melodía al pasar
tan profunda y a la vez indescriptible
cual melodía serena que se vislumbra en una flor...
De majestuosidad las plantas se visten;
¡algúnas se divísan, con colores canturréan!
dejándo entrever gotas de lluvia caer...
bendiciéndo el suelo, que las vió nacer.
La lluvia cae majestuosa y serena
sobre el verdor humedo y dominante;
el viento sobregira tenaz el rocío
y atiborra mi alma do contemplo.
¡El frío es intenso, y es cuantívo!
aún se escucha de la lluvia melodía sin fín
y deja entrever la silueta de un ángel
que anuncia ferviente un nuevo amanecer de sol...
adb-10/13/96-MH-0156-()-By:jlcr-Jorge L. Casado