¡Dolor de ya no ser, de ya no tenerte, de que me olvides! de que yo ya no vuelva a probar tus cómplices labios, de no poder volver a robar tus besos, de no poder volver a recorrer tu cuerpo con mi lengua¡ de no volver a hacerte el amor en el ocaso con la incipiente luna como único testigo!, todo eso extraño y deseo como el más fuerte de mis deseos volver a esos mágicos momentos que llamaba felicidad..