Annabeth Aparicio

La Poeta Pide un Beso

Disfruta de mi boca las dulces ambrosías

que traje de la Grecia, para deleitarte

y en medio de mordiscos llenarte

de besos con frescura de sandías.

 

Paséate por los labios delicados

tan rojos como la sangre de una herida

no se negarán al placer de tu mordida

y se entregarán a todos tus pecados...

 

Y la delicia y el gusto serán tantos

que se gozará el cuerpo entero

al sentir tus labios de exquisito calor.

 

Y al dios Eros, a quién rindo mil cantos,

daré gracias, si ese beso venidero

proviene de tu sensual boca de amor.