Si me dices que piensas en mí de esa manera.
Si me miras con tu loca ternura.
Si me abrazas y suspiras en mi oído cosas bellas
como nadie más sabe hacerlo:
Quiero besarte la boca.
Si amaneces a mi lado
y me observas mientras duermo.
Si llamas a mi puerta estando adentro
simplemente porque te gusta mi voz.
Si me pides que te pase la mano por la espalda
porque necesitas caricias extras:
Quiero besarte la boca.
Aunque me encantan tus manos,
tus párpados, tus orejas y tu nariz
me quedo con tu boca
porque es la única que me responde,
que vuelve a mí tan dulce, tan serena,
tan amable y tan generosa que puede pedirme más.