Enamorado de tu ser,
me perdí de mi propio yo,
me desconozco,
me dejé en el olvido, en quebranto.
Contigo aprendí
que la verdadera unión y
el verdadero amor se forja al
crecer juntos en el mismo abismo.
Aunque ya no estés conmigo,
seguiré mi camino y encontraré mi ser,
Pero por ahora, dejaré que el viento sople
me lleve a donde tenga que estar,
sin control ni reproche.