De nuevo en la encrucijada del laberinto, de nuevo en la larga y oscura noche donde los pensamientos son el bullicio inquietante, son tormento sin paz, son todo un sin fin de ruidos atormentándome de nuevo, me siento atado sin cadenas, de nuevo llega una noche de esas donde la desesperación quiere salir victoriosa.
Infinidades de posibilidades y caminos concurrentes, de esos que en su momento en alguna etapa de la vida fui pasajero del destino, donde ahora me siento atascado sin respuesta, donde la amarga noche me vuelve su prisionero.
Caminos de un laberinto sin luz, sin escape, muchas entradas y pocas posibilidades de salidas, algunas llevadas a otras enredaderas, y otras con las llaves pérdidas.
¿Qué camino tomar?
¿Qué voz escuchar?
En el susurro nocturno la voz interna quiere confundir el paso de mis piernas andando, me llevan a muchos caminos y la lucha es constante, me pierdo entre matorrales y de nuevo sigo en el mismo lugar de nunca acabar.
Y de nuevo, sigo en una lucha constante con mi yo interno, sigo dándole batalla y aunque parece estar ganando, continuo aferrado hasta encontrar la verdadera salida del laberinto.
Henry Ruiz
28 DE FEBRERO 2023
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