Hector Loaiza

Amor fĂșnebre

Las olas, el desvarío y la noche,

gaitas melancólicas

de aquellos tiempos,

resuenan en el ancho del río de tus ojos donde se encuentra mi amor ahogado,

 

Solo tus hilos mueven mí cadáver pálido cómo una marioneta de tu capricho

que va y viene así como tú lo deseas

y de pronto canta y abre sus ojos

apagados que sepulcran el arcoíris.

 

Me encuentro atrapado en esos luceros funebres entre el tormento de los arcos y las flechas

 

que marcan un caminó hacia tus besos de infinito dolor.