A veces pequeños,
colapsados por nuestros
problemas oarticulares.
Vivienda, salarios,
familia, amigos.
Vamos y venimos,
en fatigosas tareas
de alcanzar la equidad.
Y es todo.
Y es enorme
para alcanzar
una vida
quizas feliz.
Pero todo ello,
nos hace perder{
alcanzar bellos sueños,
porque no hay tiempo.
Imbuidos de celeridad,
nos dormimos ya cansados.
En otras regiones,
ya sea por guerras,
por habrunas
o por falta de libertad,
el hombre sobrepasa
su pequeñez.
Es grandioso,
cruza mares y océanos,
en barquillos o barcazas,
sometido a olas rugientes.
Se atreve.
Se agiganta,
A veces llega a tierra firme.
A veces queda en el mar,
escribiendo una poesía inmortal.