Classman

UN TRISTE ADIÓS


Que triste adiós 

que ingrata despedida

dejó en los dos

una profunda herída.

 

Como un tormento

recuerdo cada día

aquel momento

tan lacio de mi vida.

 

Tu extremada frialdad

apagó aquel resplandor

ahogando mi dignidad

con el sello del rencor.

 

Nunca sabré la verdad

de porqué todo acabó

quizás fue tu vanidad

la causa que lo agravó.

 

Solo queda lamentar

que ya nada será igual

que no volverá a brillar

ese amor tan especial.

 

                                         Classman