En el altar, su alteza
nadie deslumbra más que usted
de rodillas admiro
su belleza peculiar
En el altar , su alteza
nadie la puede tocar
la vitrina no me deja su porte profanar
En el altar, su alteza
nadie la puede ayudar
los mantos teñidos de carmín
dictan una cosecha en paz
un sacrificio más
En el altar, su alteza
nadie la pudo salvar
su mirada despavorida
la piel pálida al sol se empieza a colorear
En el altar, otra dama mas
En el altar, su majestad
no deja de rogar