¡Victoria!
Ven siéntate aquí...
Hoy quiero que me dejes
Shhh... No digas nada
Ahora soy yo... Quien manda.
Déjame hacer lo mío
Abre tus puertas
Y deja que dome a la fiera
Que aunque se imponga no tendré miedo.
Está vez su fuerza me atrae
Y aunque tu mirada es tierna
Tu cuerpo va a la guerra
Y ahora soy yo, quien vive feliz.
Hoy usted no ordena
Yo seré tu contrapicado
Y saborearé tu cuerpo
Ahora soy yo... Quien come.
Te lo vuelvo a decir
Shhh... Calla y no digas nada
Que vendaré tus ojos, al sentido
Y abriré tu mente, al placer.
Te quiero ver allí en tu trono
Tú Sonríe, y déjate llevar
Ya tu fiera es mi presa
Y ahora soy yo quien ataca.
Esto no es la guerra
Es el encuentro de dos mundos
Esto no es una Batalla
es la fuerza de dos cuerpos encontrados.
Yo insisto solo calla...
Este placer es de dos
Y el resto sobra... Shhh
Ahora eres tú... Gime
Tu imaginación vuela
Tu cuerpo se impone
Y yo me hago más débil
Ummm perdí, gotas de ambrosía.
Y el color de la Pureza
Cae en mis labios, me alimenta
Y luego, el rocío ardiente
Cuál lluvia dorada, me bendice.
He sido manchado
Ése es mi triunfo
Y ahora eres tu...
Quien canta, ¡Victoria!
Autor: José Julián Colmenárez Barrios