Vivimos inmersos por lograr cabida, en un mundo abyecto
perdido entre el ruido; cuyos dirigentes, alcanzar quisieran
muchos beneficios en su economía.
Las prisas que obligan cambiar por dinero nuestra fuerza y vida,
con la negra sombra limitan tu mente y tu razonamiento.
Tener nuevo carro lujoso y costoso muestra tu espejismo
y de copiloto la niña sabrosa que baila sin ropa...
¡bueno!! Con un gran sombrero; ser bolsillo roto gastando dinero,
sin importar cómo has de conseguirlo
ni a quién perjudiques con tu actuar de orgullo casi pendenciero.
Olvidas que fuiste el amor de tus padres y lograron fueras lo que hoy te sustenta;
lo que ellos esperan es que tú como ellos, la felicidad encuentres,
Sin dañar a nadie; más bien, que tu siembres aquella semilla de amor,
que muy dentro llevas; y, cuando florezcan aquellas semillas,
digamos en coro:
“La vida es un sueño”
Seir Holbein Salazar S-Colombia \"shoss\"