Flor de dos días
que la razón marchita
toda la fe en la ciencia toda
dulce e intenso tu beso dulce
bueno nuevo tierno y suave
la vida espera la muerte llega
un atardecer que te nace despacio
qué sino pétalos aleteando
qué sino íntegramente tú
y si no tu verdad incolora
digo suprema.
Saldré del pozo despeinado
esclavo de mis deseos
una jarra de sombras
los círculos de piedras
los caminos de polvo
las tapias de beleño
las nubes que imploran
agua que no moja.