El humo y el cenicero
El fuego de un yesquero
Hacen de un hombre,
Un señor tabaquero.
La copa y la botella,
Su perfume de gardenias
Atraen la mirada
A su vestido de azucena.
El tabaco y la botella,
Un Rivera del Duero,
Paren la centella
De este encuentro pasajero.
Una luna inspirada
Pinta la ensenada
Y la jungla de cemento.
Donde el hombre y la dama
Cosechan a fuego lento
Mas allá de besos y alientos.
El fin del comienzo
Sella este evento
Con las Esperanzas,
De contigo,
Un reencuentro.