Si dijese,
que mi día eres tú.
Mitad noche, mitad sueño.
Latido fuera del pecho
y corazón mar abierto.
Si insinuase,
atardeceres de besos.
Mis ojos
ahogando en tus ojos,
y un llamando en silencio.
Si afirmase,
que el tiempo es solo un vuelo,
que me lleva y me trae
de tu tibio nido
al limbo de lo incierto.
Si sugiriese,
mi mano sobre tu mano,
mis dedos entre tus dedos
y una marea sin fin
rompiéndose en tu lecho.