Alguna noche clara se verán los pasos,
vendrás hacia mí de puntillas,
con sigilo a escondidas de los cuervos.
Y traerás tus problemas en tú espalda,
yo te ayudaré a cargarlos.
Labraremos en lo profundo,
no hablo de la tierra,
sugiero que sea la corteza del corazón,
si vamos a ensuciar nuestras manos,
que sea para limpiar nuestra alma.
Alguna noche no tan oscura,
veré mi rostro en tus ojos miel
y anticiparás lo malo de aferrarse
a otro aliento
¿Lo malo?
Nunca hemos sido buenos para el viaje
¿por qué temerle a estacionar?
Sirvamos de eje para la fortuna,
por vez primera
sigamos el ejemplo del Sol
y que todo a nuestro alrededor
siga su curso,
tratando de sincronizarse con la luna.