Hace tiempo que no escribo
y el astuto zorro en mi hombro
saboreando mi oído
mordisquea cuando ronco.
.
Mis pestañas abanico
despierto sin poder verlo,
culpable se hace el dormido
acurrucando su cuerpo.
.
Retomando mi negocio
acomodo mi almohada
para digerir el opio
recordando que soñaba.
.
Con su pata en mi cabeza
él me mira insatisfecho
susurrándole a mi oreja
-Levántate so zopenco-
.
Es de sabios el descanso
no escucho y me hago el dormido;
y al moverme, su cola aplasto
retorciéndose en un grito.
.
Me obligaron que despierte
sobre mi cara, sus garras;
él enojado me muerde
en mis bendecidas nalgas.
.
Por la mera obligación
me levanto ido y descalzo
para escribir un borrón
en un veintiuno de marzo.
Luccass- 21 de marzo del 2023