Este poema, que nació una noche oscura,
Sin estrellas, una noche sin luna.
Me vino de repente, de algún lugar del espacio,
Llegó a mis manos, muy…muy despacio.
Este poema, que no busqué.
Estos versos, que no esperaba.
Escondido estaba en mi alma,
En mi corazón aguardaba.
Este poema, que vino de la nada,
Que surgió de un sueño imaginario;
Se cristalizó como aguas de la nevada,
Se convirtió en un inesperado milagro.
Lo escribí,
Porque me absorbió el pensamiento.
Lo recibí,
Porque me llene de sentimiento.
Este poema, que me inspiró una noche oscura,
Sin estrellas, una noche sin luna,
En donde estuvo ausente la hermosura,
Y no cumplió su cita la ternura.
Lo escribí, porque pensaba en ti.
Lo escribí, porque me sentí feliz.
Estos versos, que yo no me esperaba.
Este poema, que gravitaba en el olvido.
Se lo dedico, desde mi alma;
A la mujer por la cual suspiro.