Felipe Jacome

Si tan solo

Dame de ti aquello que se esconde en las noches, quiero saber lo que piensas a deshoras, como cortas la ceniza con un suspiro, cuando estás desvariando en tu ventana.

Dame de ti aquello que pierdes en tu cabeza, con lo que ahogas tus recuerdos, como te ensordece el eco que existe dentro de ti.

Y si tan solo dejaras de estar tan confundida y acurrucada, sabrías que el eco no son latidos, son gritos.

Si tan solo dejaras de estar tan entusiasta y dulce sabrias que morirías con un apreton a brazos llenos.

No necesite jamás de tu locura pero si la disfrute incluso cuando la duda recaía sobre mi, sin darme cuenta


No necesite decirte que te quiero, porque aun cuando llorabas y tu alma triste corria a abrazar mi rígido esqueleto, me pesaba todo el cuerpo y por un momento me sentía tan eterno, que nublado de fulgor te sonreía y de inmediato te atacaba con un beso.