Ruidosa, así era mi noche.
Acompañada de silbidos; grillos y chicharras
que adornaban el lugar con un oscuro color...
Ausente la luna y mi soledad hace presencia,
es ella misma que al sentarse frente a mí,
se sonríe y en tono de voz burlona murmurando entre dientes me dice; \"escuchas eso\"
ladridos de perros, ecos que dejaba el día y sin el más mínimo consuelo
oscura mi noche, sin compasión alguna hace de mi su antojo.
autor: w.Giraldo