Los pensamientos son constantes del sol y la luna…
Que ilusionan al amor…
Los días pasarán y los sentimientos crecerán…
Entre sonrisas y caricias, fluye la armonía…
Horas interminables de charlas descubriendo la mente…
Dos corazones y la atracción se aceleran…
Se fundirá la pasión entre dos cuerpos…
La fragancia del sudor se plasmará como un sello de amor eterno…
El corazón conjura la belleza de la soledad…
Y reencuentra el afecto que buscaba, sin embargo…
Uno sigue creyendo en la palabra…
La palabra es un contrato…
El contrato más hermoso que existe…
Esto quiere decir que uno entrega el corazón y queda indefenso ante el efecto. El tiempo pasa y la armonía se torna vida, llena de alegrías y penas de amor. Solo uno solo sabe cómo sobrellevar la carga. Solo el destino sabrá si ese contrato será hasta el fin de tus días. Yo vi tu corazón brillar en tus ojos, y eso me dice que tu secreto es el aroma de tus labios. Que los robare para mi eternidad. Los fundiré en mi pecho como una señal dispuesta de tu parte, como la entrega de tu palabra.
Solo recuerda que el destino está enamorado del esfuerzo…
Juntos haremos el futuro del destino, sin querer…