Y cogeré tu corazón rojo, lo sembraré en los vestigios sanos de mi amor, lo regaré con besos hasta hacerlo florecer.
Luego, tomaré tus labios, crearé una sonrisa para ti y la vestiré con mi piel.
Tomaré todo tu amor y le mostraré lo que he amado, lo que amo y lo que amaré.
Y si tienes penas, dolores y miedos, los besare y los haré míos, hasta darnos dos nuevas vidas en un cuento de hadas.