Le pedimos
paciencia al padeciente
y cuidado al pisar
al no vidente.
Le pedimos
atención al autista,
honestidad a los políticos,
y al culpable que se entregue.
lluvia al verano seco,
rayos de Sol al frío invierno.
Le pedimos flores al otoño
y urgencia a la primavera.
Tranquilidad al desquiciado,
calma quien la pierde,
exclusividad a la puta,
y amor al corazón roto.
Pidiendo sin pensar,
rozando el colmo.
¿Cómo no le íbamos
a pedir peras al Olmo?