Anne Black

La muerte

Qué extraña es la muerte, ¿verdad? Ese gusto amargo que deja cuando alguien importante se va. Automáticamente comienza a andar una ruleta de interrogaciones; gira y en cada parada sale una pregunta que ni tú sabes qué responder.  
Bueno eso mismo me pasa en este momento. No era alguien que conociera de toda la vida, no, apenas comenzaba a conocerla. No obstante me quede mal, con culpa, angustia y a la vez en shock. Mis emociones están congeladas. No se qué pensar, qué decir o qué creer. Solo sé que la muerte es la visita mas desagradable y que nunca te encuentras preparado para recibirla, y aunque así fuere, el efecto no dejara de ser el mismo. 
Hice todo lo posible para ayudar, pero el destino me alcanzo, o tal vez ella no tenía las ganas suficientes para vivir y fue una decisión propia. 《 contra eso, no había nada qué hacer 》 decirte que al menos lo intente sería un modo de consuelo que la verdad, no me sirve, no me quita esta amargura. Me pregunto si no hice suficiente, pero sé que el tiempo estuvo en mi contra. Fue todo muy rápido, no me dio lugar a mucho mas de lo que hice, y algo en mi me decía que esto podría ocurrir, casi afirmando que se iría, por mas que siguiera intentando mejorar su diagnóstico. Ya ves, no conseguí nada. 
Tú mejor que nadie entiendes mi forma de pensar, la facilidad para aceptar la muerte, para transmitir algo de tranquilidad y quitar remordimientos en la gente o en los animales, antes de partir. No presiono para que se esfuercen y se queden en este mundo, pues si tienen que despedirse, que lo hagan con la conciencia tranquila, sin sentirse mal por los que sufren o sufrirán su ausencia. Lo importante es que no exista agonía, que la muerte sea digna y el alma alcance la luz. Que el cuerpo descanse y ambos sean recordados con cariño. 
Qué extraña es la muerte, que acostumbra a llegar sin permiso. Llega y no puedes esconderte, y aunque la desafíes, tarde o temprano te atrapara. 

 

En un suspiro serás un triste recuerdo, y una bonita historia que contar.🥀