Fabricio Terán

Votos

 

Ahora las calles son del agua.

Y mi vida te espera

inundada. Ya siento tus…

Cuando el viento deja caer

campanas amarillas y blancas

de sus barbas atemporales.

Pero, un día dura un mes

hasta llegarte plenamente,

como otrora y dejar… te

vestida y sin zapatos, como en la primera

cita; amándote,

con “todo el tiempo del mundo”,

otra vez,

hasta que me ahogue tu rocío

suave

como iones

-déjame el rostro-

de alboroto

y nutritivo cristal.