Hoy estás triste, acabado, sin dicha en la sonrisa, sin convicción en tus sueños, en un camino sin huellas, en un abismo, alejado de todo lo que te gustaría ser. Te sientes derrotado, humillado por la vida, atraído incluso por tus propios miedos. Avanzar es tu peor paso en falso.
¿Se han reído de ti? ¿Te han hecho ver que no eres capaz de lograr algo por ti mismo? ¿Te convencieron o tú mismo te convenciste de que no eres nada?
¡Escucha!
La derrota no existe, existe el derrotado, el mediocre, el que no sabe aprender de las caídas, el que teme cumplir lo que se atrevió a soñar un día. Un verdadero hombre lucha por lo que merece y no se deja llevar por lo que otros creen que debe ser. No les dejes creer y cree en ti. Hoy vas a ser un hombre mejor, uno que se va a levantar para posicionarse en medio de su mayor objetivo: el éxito.
El éxito es lograr ser feliz y la felicidad es un gran abanico, un largo horizonte y todos la fijan en lo que más necesitan. Pero la necesidad te lleva a cometer errores. Tú debes actuar sin necesidad, es la única forma de alcanzar el éxito. Piensa. Ya eres exitoso. No necesitas nada más.
Hoy tienes más que los demás. Eres más exitoso y menos que muchos, pero debes pensar que lo que tienes es lo que mereces, pero hasta hoy, porque hoy debes cambiar, y cambiar es querer lograr mucho más. Si hoy no eres feliz, hoy debes cambiar y querer lograr mucho más, pero sin necesidad. Porque toda necesidad te lleva a la ansiedad. Vas a lograr ser feliz. Vas a lograr ser más exitoso de lo que ya eres, y cambiar es la fórmula. Apostar, creer en uno, aprovechar a los demás, sembrar alegría, eso es ser un líder.
En tu trabajo, por ejemplo, no todos los jefes son líderes, ni todos los líderes son jefes. Un líder es mucho más que un jefe: es un sirviente. Y un líder es exitoso y visto como tal, y como tal debes comportarte y elevar tu éxito llevando a los demás, pero sin necesidad. Hoy vas a ser un hombre mejor, o aún más porque ya lo eres. El éxito es un camino obligado para todos. Todos somos exitosos y todos podemos extender ese éxito a lo largo de la vida.
¿Quieres ser rico? Piensa... ya lo eres por el solo hecho de pensar en serlo, siendo un hombre responsable, con visión, con un camino claro que te sabe elevar siempre cada sueño hasta la cima.
Atrévete. Dime... ¿Qué puedes perder si hoy estás luchando por algo que nunca has obtenido? No pierdes nada. Solo puedes ganar. ¡Escucha! Hoy es el inicio de tu mejor versión. No hay otro día. Hoy ya amaneció y debes conseguir lo mejor de lo mejor. Hoy te levantaste... y eso ya te hace un vencedor.