Una de cal y otra arena,
de lo falso a lo real…
de lo oscuro a la cordura…y de manera inversa.
De lo existente a lo inmaterial…
y las fantasías merodeando en lo original.
Lo ficticio intentando hacerse cierto,
simulando ser verdad…intentando convencerse.
Lo puro en blanco…lo negro en quebranto,
deduciéndolo…solo suponiéndolo…
como una dualidad dependiente…
indispensable…transmutable,
como un desdoblamiento inevitable…
explorando el equilibrio…
buscando en la mesura…la armonía delirante.
Soportando el drama,
sobreviviéndole a la existencia…
y descubriendo los enigmas de la incertidumbre,
interpretando las vacilaciones ambiguas de la permanencia,
de un mundo confuso a un infinito de talentos,
cruzando el laberinto del aprendizaje,
imprimiendo huellas indisolubles…
para evitar los deslices al abismo de lo irreversible.
Dilema…
yo en silencio y tú en constante actividad,
tú de la algazara y yo de la soledad…
como dos incompatibles…discordantes …
divergentes pero dependientes,
irónicamente necesitándonos …mutuamente…
como sombra y luz
como agua refrescante y fuego ardiente,
alternativos…complementos.