Mario Suarezz

Esperando el cielo.

Estoy inquieto no pudiendo esperar

ese momento que todo sea calma y claridad

la paz inunde todo la insípida banalidad

cansado de ver como todos se dan en matar.


Cuanta locura, cuanto grado de insanía,

revolcado en la tierra cada ser pretende vivir

¿de algún modo la divinidad podrá convertir

lo que atesta a nuestros simientes con osadía?

 

Mejor me pierdo en lo caótico, vaya remedio,

de tanto escuchar lo sucedido uno se pone sicótico,

conjugar un par de pastillas extrañas es un medio

poco convencional pero efectivo para lo ilógico.


Alguién se dio cuenta de que estamos en el fin

de lo que la historia humana espera por consagrar,

religiones dicen que el día celestial está por llegar

todo lo sufrido se teñirá con lo frutal del jazmín.

 

Mario Suarezz