Pascua en Rojos Ardientes, Abrumada, Indescifrable,
Que mora y Muere en cada Año y en cada Verso...
Pascua Feliz de la Pasión y Resurrección del Mesías,
Que reza las Horas del Incógnito Triángulo...
Pascua y Viernes Santo, que en Muletas Torcidas,
Refleja el Espejo Espectral de lo que tu Vida ha sido...
Pascua de Vida y de Muerte, de Penas y frías Lágrimas,
En donde en Vientos Gélidos velaron sin Tiempo ni Historia,
A Cristo, a mi Abuelita,
mordido este Dolor Antiguo, que aún acuchilla y Sangra...
Pascua de Domingo de Resurrección,
en donde hace dos Décadas
Buscaba Aturdida, Desvaída, Desmayada,
como Velar la Muerte de mi amado Padre...
Mientras en esquiva Alegría , Jesucristo resucitaba...
Pascua Habitada en estos solos Sentimientos,
que Traspasan, todavía mi Alma en Filos Punzantes,
que no Olvidan,
los llantos y los Oídos Secos,
de tanta Tristeza y Angustia que no Desaparece,
que me acecha Constante...
Pascua sin Fiestas, sin Perdones,
Y con Cristo festejando su Divino Día...
(Y para quien Escribe, sin Misa, en eterno Oscuro,
sin abuelita ni Padre, tan amados,
Y ya en lo Eterno, para Siempre, Perdidos)...
(Patricia)