Me gusta caminar bajo la sombra
ver una flor lila que nace en el jardín silvestre
confundir con la noche al sol y la mirada que enternece
No soy lo que creí que era
no tengo cinco dedos
y tan poca piel
Miro sin esfuerzo correr la sangre de olivo y la nutria que no abraza
En un río de mar me detuve a esperar que me encontrara y solo sola me entretuve al mirar al mar que me miraba
no soy lo que creí que era tan poco soy el zancudo de los sueños.