TRILCE

DÉCIMAS

DÉCIMAS


Todo el mundo es testigo

Amor de mis amores

Que por las dudas y gemidos

El llanto y desconfianza a nacido

No se si haz tenido razón

de enfadarte  así conmigo ,que

las noches de febril desvelo

Eran solo por pensar en ti,

la vida se empeña en separarnos y alejarnos

como el día y la noche que aparece y desaparece.

 

 

Tristeza, tristeza, ya no por favor

Yo no me obligues a llorar más

Por ese ingrato amor, porque su recuerdo

Es como la luz del sol

Que me quema hasta el fondo del corazón.

Es cierto ya no quiero

Más  amar, lo único que quiero

Y te pido es que

Por piedad me ayudes a olvidar.