Haz mi Señor que vea el sol cada noche,
y en la barbarie terrestre
rescata mi alma alojada en su túnel,
hacia tu claridad celeste ...
Y cuando mi vida se acabe,
que mi ángel custodio sea mi soporte,
para contigo quedarme,
y protegido por siempre saberme...
Más junto a la Virgen, tu madre,
el \"amor\" será la palabra que me aguarde,
de llamarada omnifulgente,
que no se consume, eterna eternamente...
Ya que elegí adorarte,
a tu Verdad que nos une y no se extingue,
como un brillante al aire
que se prende en mi alma deslumbrante...