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Se vale amarla así ...

Se vale amar así …desde la nostalgia,

haciendo a un lado la melancolía,

desde los recuerdos más queridos,

desde la añoranza de los momentos inesperados,

los lugares, los instantes…

las emociones palpitantes,

las pasiones derramadas…

y los bellos tiempos compartidos.

 

Se vale amar lo que se extraña,

aquello que alguna vez nos conmoviera…

y nos agrandara el alma,

lo que nos provocaba las alegrías,

lo que nos robaba los suspiros,

todo lo bonito que significaba,

todo lo sublime que un día nos deleitaba.

 

Se vale cualquier gesto…

un beso…o esos ojos que brillaban,

tal vez un segundo de locura…

o esas largas y meditadas horas de cordura.

 

Se vale amar lo sufrido,

lo porfiadamente soportado,

las lágrimas vertidas …convertidas en llanto desconsolado,

y los amargos sinsabores aguantados,

los resentimientos perdonados…

y aquellos insomnios que solo ella provocaba,

las lunas radiantes cuando me acompañaba,

los sábados de lluvia contemplando la tempestad desde la ventana…

y los domingos de sol…cuando paseábamos… y nos enamorábamos.

 

El vino en la mesa…

y el destello de la hoguera en las sombras heladas,

las noches de pasión descontroladas,

la lujuria al borde del orgasmo desatado…

envueltos en una ofensiva cuerpo a cuerpo…incontrolable y titánica,

las auroras cuando dormía…cansada de tanto ímpetu fogoso,

y los despertares con antojo de otra batalla,

sus mañanas de pereza …estirada ahí en la cama…

entre sabanas delicadas,

y el olor a café en la cocina,

sus fachas de princesa despeinada,

sus pies descalzos y sus interiores en el piso… tirados,

su desnudez paseándose por la morada,

y mi excitación acosándola con la mirada…

con unas ganas de que jamás termine este delirio insaciable…

implorando que nunca se vaya.

 

Se vale amar así…como yo la amo…

a pesar de su ausencia hiriente y fría.

 

Se vale amarla así todavía…

por todo lo disfrutado en su dulce compañía,

por lo tristemente sufrido con su huida.

 

Se vale amarla así…sin que lo sepa,

de la manera más silenciosa,

de la forma más disimulada,

y discretamente seguirla extrañando…

por el resto de mi vida,

porque para amarla así…no hace falta que regrese…

porque en mi corazón sigue latiendo…

porque siento que nunca se ha ido.

 

Porque ella fue…sin dudarlo…mi poema preferido.