ENTRE ROSAS Y ENTRE ESPINAS
La vida es como un sendero
Que debemos recorrer
Donde hay esperanza y consuelo
Y tristezas por doquier.
La esperanza es don del cielo
Que no nos falte en la vida
Sin ella nunca podremos
Vivir en plena alegría.
Si tenemos alegría
Llevaremos la esperanza
A los que en esta vida
La tristeza los alcanza.
Qué triste el que en esta vida
Tropieza con las espinas
Y no ve que más arriba
Una flor perfuma el día.
No nos dejemos vencer
Por amarguras y penas
Que lo mejor es querer
La vida más llevadera.
Tengamos paz y alegría
No nos falte la confianza
Y llevemos en la vida
El amor y la esperanza.
Si en la vida siempre andamos
Entre rosas y entre espinas
Que el camino que elijamos
No sea triste caída.
Que llevemos la esperanza
Y consuelo a los demás
De esta forma nos alcanza
La propia felicidad.
NINA DEMARCO
UN POEMA LEÍDO AL AMANECER
Un poema leído al amanecer
entró para quedarse
entre los pliegues del alma
y acepté mi destino
de poeta de sangre…
Se coló por mis venas
esa veta materna
y hoy te honro en mis versos
mi querida madre.
Si aún estuvieras
de este lado del muro
te vería seguro
escribiendo tus letras
con el brillo en los ojos
y tu sonrisa traviesa.
Si aún estuvieras
me verías tratando
de comprender al mundo
y de tomar las riendas
de esta alma inquieta
que se dice poeta.
Un poema leído al amanecer
entró para quedarse
y hoy te recuerdo ¡MADRE!
Carmen Teresita Acosta