Playa solitaria,
el mar choca con las rocas,
las gaviotas giran libres,
esclavas
silenciosas del hambre,
que circula
como lava ardiente.
Una gaviota solitaria en la roca,
las plumas, como olas,
del viento sur
mirada hecha de horizonte
patas de hilo, agua y sal.
Gira..
A veces silencio y hambrienta.
A veces canta y hambrienta.
A veces, solitaria y hambrienta.
Cada hambre tiene un lugar
distinto,
solo el hambre
de cada día,
de cada amanecer
tiene un solo lugar
nace en ti,
Tendrás que girar
y sumergirte en lo hondo
donde solo llegas tu.
Gaviota,
el hambre tiene una causa,
un lugar y un silencio.
El mar no te espera.
¿Qué buscas en la cordillera?