SUEÑOS DE AMOR.
Bajo tu blusa blanca, transparente,
tus juveniles senos son gaviotas,
anhelando volar tierras remotas
y salir de su jaula finalmente.
Se turba tu mirada persistente,
en un incendio de deseos flotas,
y entre un húmedo olor de rosas rotas,
un beso se posó en tu boca ardiente.
Y fue la noche cómplice oportuna,
en complacencia suspiró la luna,
mis caricias vencieron tu temor.
Se unieron nuestras almas en cantata,
Mozart con su pequeña serenata,
y se escucha de Liszt sueños de amor.
KIN MEJIA OSPINA