Veo en el cielo las nubes y un deseo postrado en ellas; veo el cielo oscuro y los relámpagos acechando, como depredadores esperando encontrar el punto exacto donde dar su fulminante estocada.
Miradas que se cruzan
solo cuando giro hacia el pasado
no estás ahí sino a un lado;
dos caminos escarpados
que tan solo nos azuzan
Sobre ti una nube tormentosa
y tú quieta y empapada
con postura decidida
me miras fijo, atormentada
diferente y afligida
Veo arriba, miro al cielo
y mi camino disyuntivo
unas nubes en duelo
un juicio en el suelo
y mis pies ardiendo
El horizonte divergente
y al frente dos destinos
uno acaba en un puente
y el otro al precipicio
Debo pasar por el brasero,
el juicio del Sol,
y ser digno y verdadero
o caer en el abismo,
la condena de mi amor,
y perderme en el olvido