Cuando mi alma vuele
del otro lado del cristal
sucio y trasparente.
A una promesa vieja y lejana;
de halcones que vuelan,
como vuelan las pavesas
en las fogatas..
Cuando el feroz silencio
devore hambriento,
la voz sincera de mi habla..
Cuando mire sin luz,
al rostro que desaparece
tras un espejo sin nada..
Quiero que mis restos yacentes,
jamás toquen la espuma del mar..
Cuando mi última promesa
cumplida o no,
se deshaga diluida de rabia
en la eternidad..
Cuando se olviden que un día reí;
y lloré; y amé y maldije..
Que mi carne indolente
no pruebe nunca
de las aguas su sal.
Quiero que mi fragancia
sea fiemo en la hazada del gañán.
Que mi sombra,
sea terrón en la ladera.
Cuando mi sueño
se haga más profundo y más eterno..
Que mis ojos verdes
se reflejen en el trigo verde
de la espiga serena..
Yo no quiero olas
que incordien mi gloria o mi erebo.
Ni océano ni mediterráneo
del que yo reniego.
Que mis restos habiten
entre lantiscos y retamas,
entre vientos serranos
y tierra de labranza..
Que sirvan mis carnes
para las aves
y mis huesos testigo,
que fui del campo, amante..