Sólo confía en el amor
que nunca te condiciona,
y que nunca te aprisiona
con los lazos del dolor;
entrégate a ese fervor
que sobre todo perdona,
y que jamás te abandona
siempre te da su calor;
goza de la libertad
de ese bogar muy ligero,
de la sana honestidad,
de un sentimiento sincero
que demuestra su verdad
cuando te dice: -te quiero...