Con vívidos destellos, pregunta tu mirada
si habitan mis recuerdos tus ojos soñadores;
si guardo en la memoria su luz inmaculada
que trajo la belleza de célicos fulgores.
Tu cálida sonrisa, serena y muy radiante,
de forma bonancible, se atreve a preguntar
si tengo en mis recuerdos su rayo deslumbrante;
que lleno de ternura me supo conquistar.
También tus labios rojos, en donde miel bebía,
con gesto voluptuoso, pretende conocer
si aún tiene mi boca tu mágica ambrosía,
que fuera de mi vida su fuente de placer.
¡Entonces con el alma de místico poeta,
le digo que en mis sueños pernocta su silueta!
Autor: Aníbal Rodríguez.