No saben lo que quieren pero quieren
no quieren lo que saben aunque saben
ni evitan que sus juicios menoscaben
a aquellos que lo saben y zahieren.
Son las caperucitas de estos tiempos
se muestran inocentes, casi bobos
mas portan los colmillos de los lobos
y son sus mordeduras pasatiempos.
Si acaso los topases en sus sendas
y no les admiraras sus bolillos
verías que sus sicas son bolsillos
donde lo que no tienen son agendas.
Parecen en sus charlas; suaves lisos
pero en el fondo son; igual que erizos.
Son en sus pasadizos
espaldas de un velorio do las palmas
acarician sin cesar sus propias almas...